Respiración profunda
La respiración profunda ayuda a mantener los pulmones limpios. Si le hicieron una cirugía, esto le permitirá una recuperación más rápida. La respiración profunda también ayuda a respirar con más facilidad y puede prevenir una infección pulmonar u otras complicaciones.
Cuidados en el hogar
Siga estos pasos para practicar la respiración profunda:
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Siéntese en el borde de una cama o una silla. También puede acostarse boca arriba con las rodillas un poco flexionadas.
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Si le hicieron una cirugía en el pecho o el estómago o cerca de estas zonas, sostenga firmemente con ambas manos una almohada o una toalla enrollada contra el corte (incisión). Abrace la almohada.
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Exhale de forma normal.
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Inhale hondo por la nariz. Debe sentir que se empuja el estómago mientras inhala.
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Mantenga la respiración de 2 a 5 segundos si es posible.
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Frunza los labios como si fuera a soplar una vela.
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Con los labios fruncidos, exhale lentamente por la boca. Debe sentir que el pecho desciende mientras exhala.
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Descanse durante unos segundos y respire con normalidad.
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Relaje los músculos del cuello y los hombros.
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Repita los pasos anteriores tantas veces como se le indique.
Seguimiento
Programe una cita de seguimiento o según le indique el proveedor de atención médica.
Cuándo buscar atención médica
Llame al proveedor de atención médica de inmediato ante cualquiera de las siguientes situaciones:
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Fiebre de 100.4 °F (38 °C) o superior, o según le haya indicado el proveedor
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Signos de infección en caso de que le hayan hecho una cirugía. Algunos incluyen enrojecimiento, hinchazón, secreción de pus o líquido o calor en el sitio de la incisión.
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Esputo con sangre o de color marrón (mucosidad)
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Sangrado escaso en el lugar de la cirugía
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Tos reciente
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Malestar estomacal (náuseas) o vómitos
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Aumento del dolor
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Mareos o debilidad
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Ritmo cardíaco irregular o acelerado
Cuándo llamar al 911
La falta de aire puede ser señal de un problema de salud más grave. Llame al 911 de inmediato si la falta de aire empeora o si tiene dificultad para respirar, en especial, si además presenta alguno de los siguientes síntomas:
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Confusión o dificultad para mantenerse despierto
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Pérdida del conocimiento o desmayos
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Presión o dolor de pecho
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Dificultad para respirar o sibilancias
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Coloración azulada de la piel o de los labios
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Tos con sangre
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Dolor fuerte
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Sangrado intenso o una abertura reciente en el lugar de la cirugía
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